Más que cualquier otra piedra preciosa, el Jade está grabado en el corazón de la cultura de todo el Sudeste asiático, considerada una gema real.
Este satén de textura semibrillante nos recuerda a esta piedra preciosa, combinando la majestuosidad de la seda con la durabilidad del algodón y la resistencia del poliéster.
Está disponible en 18 colores que van desde el blanco perla, a tonos maquillaje, esmeralda o aguamarina.